Adeje Verde - Energía Solar

Energía solar: qué es y principales ventajas

El sábado 2 de abril de 2022, España consiguió lo que para muchos era una utopía: generar casi el 100% de la demanda interna de electricidad con energías renovables. Fue por un corto periodo de tiempo, pero es una muestra de lo que puede pasar en un futuro próximo gracias a la expansión de este tipo de energías. En este post, nos vamos a centrar en conocer mejor cómo es la energía fotovoltaica.

Es aquella que aprovecha la energía procedente del sol para producir electricidad o generar calor. Es, además, una de las energías renovables más usadas en nuestro país. Actualmente en España, la energía fotovoltaica representa cerca del 10% de la que se consume, situando a nuestro país en el top 10 mundial.

Esta energía también es una de las más fáciles de producir, por ello se ha extendido de forma significativa en aquellas zonas climáticas con más horas de sol. Pero, ¿Cómo se produce? En el interior del sol existen presiones muy elevadas y altas temperaturas que superan los millones de grados. Esta situación da lugar a procesos de fusión nuclear que liberan una gran cantidad de energía que, gracias a los paneles fotovoltaicos y a las placas térmicas, se convierte en electricidad y calor.

Tipos de energías

 Actualmente podemos distinguir entre cuatro tipos de energía solar:

  1. Energía solar fotovoltaica: – Energía solar fotovoltaica: consiste en la transformación directa de la radiación solar en electricidad a través de paneles solares que recogen los rayos del sol. Están hechos de silicio, uno de los materiales más abundantes de la Tierra. Cuando reciben la luz solar, un electrón se mueve generando corriente eléctrica. Este sistema permite almacenar la energía, por lo que suele utilizarse para el autoconsumo eléctrico en las comunidades de vecinos.
  2. Energía solar térmica: la radiación solar se convierte en energía térmica gracias a unos colectores que contienen en su interior un líquido que se calienta rápidamente con la exposición al sol. Es más asequible que los otros tipos, permiten almacenar la energía del agua calentada en acumuladores.
  3. Energía solar concentrada: el vapor se produce gracias a unos colectores que concentran la radiación solar en una zona determinada de la central. El vapor es conducido a una turbina que produce electricidad. Este sistema requiere grandes cantidades de agua, terreno y radiación solar directa.
  4. Energía solar pasiva: aprovecha la luz del sol sin necesidad de una tecnología intermediaria. Se utiliza principalmente en la instalación de invernaderos o en la construcción de viviendas ecológicas. Para ello, tanto los muros como las ventanas están creados para poder aprovechar la luz solar de forma directa. Se basa principalmente en el aislamiento térmico y en el tipo de acristalamiento y ubicación de las ventanas instaladas.

Principales beneficios de la energía solar

El uso de la energía solar se ha extendido mucho en los últimos años por sus múltiples ventajas. Y es que la energía solar es inagotable, ya que al sol le quedan más de 6.000 millones de años de vida,  es sostenible y contribuye de forma significativa a reducir las emisiones de C02.

Además, en un momento en el que el precio de la luz se ha incrementado tanto, este tipo de energía es una de las mejores alternativas si se busca ahorrar en la factura. Y es que aunque la inversión inicial tiene un coste medio-alto, las innovaciones tecnológicas han logrado reducir los gastos de instalación y mantenimiento, consiguiendo que cada vez se amortice más rápido el dinero invertido. Por lo tanto, la energía solar es más económica y su precio es menos volátil que el del gas. De hecho, la Agencia Internacional de la Energía (AIE), asegura que es la más barata de producir.

Otra de sus principales ventajas es que, gracias a la evolución tecnológica, la eficiencia y el rendimiento de los paneles fotovoltaicos ha mejorado considerablemente. Además, el hecho de que estos paneles sean modulares y puedan instalarse en cualquier lugar permite el autoconsumo de energía.

La energía fotovoltaica también supone un aumento de la autonomía energética de la Unión Europea, ya que procede de un recurso autóctono e inagotable. Esta ventaja es especialmente importante en los tiempos actuales, ya que contribuye al objetivo de la UE de lograr la desconexión total de los combustibles fósiles rusos.

Los continuos avances tecnológicos y los beneficios propios de la energía fotovoltaica, convierten a este tipo de energía renovable en una de las más prometedoras a corto y medio plazo, no solo en España, sino también en todo el continente europeo.